lunes, 2 de noviembre de 2015

Llueve dentro.


Me llueve por dentro muy fuerte.
Cada gota golpea en los huesos, en los tendones,
creando esa vibración doliente.

Sigo en aquel mar, tormentoso, revuelto,
en su interior hay piedras y troncos,
arena que es barro,
y algas que son sogas.

Sigo en aquel mar, negro y gélido,
que me golpea y me arrastra,
que me hunde y me escupe,
me hunde y me escupe.

Trago agua cuando quiero respirar
y me raja la garganta
una sal que son cristales.

Tengo que salir a flote pero ya no sé
ni hacerme la muerta,
debe ser que en la vida hay que pelear
y no flotar.

Al menos llegar a la orilla
y que la luz traspase la piel
que los rayos lleguen al hueso.

Pálidos huesos que esperan calor.

(Óleo sobre lienzo de William Turner)



martes, 13 de octubre de 2015

Pasear. Thoreau.


Pasear

Por Henry David Thoreau
José J. de Olañeta Editor
79 páginas

"Thoureau nos propone un arte del paseo que va más allá del simple ejercicio físico para convertirse en una intensa actividad de los sentidos y del alma del hombre en profunda comunión con la Naturaleza".
Yo calificaría a esta pequeña obrita como ensayo delicioso, pero quedaría demasiado cursi y prepotente, así que omitamos que lo he dicho y digamos simplemente que me ha gustado muchísimo, sobre todo, porque estoy muy de acuerdo con -casi- la totalidad de lo que expone Thoreau en su discurso. 

El ensayo se divide en dos partes Pasear y Un paseo de invierno. Creo que la primera parte sí puede considerarse como un ensayo a la manera clásica donde el autor va exponiendo sus ideas enlazándolas unas con otras, y ya, la segunda parte tiene un matiz diferente. En esta realiza más bien descripciones de lo que sería un paseo en un día de invierno, aunque también se encuentra salpicado de reflexiones, sensaciones y sentimientos que dicho paseo le provoca.

Si tu, querido lector, te consideras amante de la naturaleza, tal vez del senderismo, incluso, por qué no, de la meditación y la sensación de "escapar" de la monotonía o el aburrimiento a través de la naturaleza (o las aventuras que esta pueda ofrecerte), este es un libro para ti. Descubrirás aquí una suerte de pensamientos y sensaciones que probablemente tu mismo hayas tenido o experimentado alguna vez y que, ¡mira por donde! otros ya le habían puesto palabras hace dos siglos. 

Thoreau expone en su obra que el pasear es realmente un arte, que no está al alcance de todos los hombres, puesto que aquel que se entrega a esta tarea, debe estar dispuesto a escapar de la rutina, de vivir una aventura diferente cada día, de hacerse uno con la naturaleza, de acercarse más a los orígenes del hombre, de ser más primitivo y por ello, más libre.
"Dadme por amigos y vecinos hombres salvajes, no hombres domesticados".
Alejándose de los convencionalismos sociales y sus imposiciones. Este ser humano debe estar dispuesto a conocerse a sí mismo de verdad, y para ello, debe estar preparado, todos somos conscientes de que no siempre es fácil alejarse de los problemas de la vida cotidiana, pero es algo básico que debemos aprender a hacer para poder eliminar lastre, crecer y evolucionar.
"En el paseo de la tarde me gustaría olvidar todas mis tareas matutinas y mis obligaciones con la sociedad. Pero a veces no puedo sacudirme fácilmente el pueblo. Me viene a la cabeza el recuerdo de alguna ocupación, y ya no estoy donde mi cuerpo, sino fuera de mí. Querría retornar a mí mismo en mis paseos. ¿Qué pinto en los bosques si estoy pensando en otras cosas? Sospecho de mí mismo, y no puedo evitar un estremecimiento, cuando me sorprendo tan enredado, incluso en lo que llamamos buenas obras… que también sucede a veces".
Un buen ensayo si buscas reflexionar o, simplemente, deleitarte con lo que otros han escrito sobre los pequeños-grandes placeres que la Naturaleza nos concede.
"Espero que seamos más imaginativos, que nuestros pensamientos sean más claros, más frescos y etéreos, como nuestro cielo; nuestros conocimientos más amplios, como nuestras praderas; nuestro intelecto, en términos generales, de una escala mayor, como nuestros truenos, nuestros relámpagos, nuestros ríos, montañas y bosques; e incluso que nuestros corazones se correspondan en amplitud, profundidad y grandeza con nuestros mares interiores". 


Pelea.

Si todo se convierte en una lucha...

Levantarse de la cama,
ir a trabajar,
ponte a estudiar,
sobrevive a tus pensamientos,
sobrevive a la gente.

Sobrevive a sus ataques, a sus ganas de humillarte,
sobrevive a sus esfuerzos por domesticarte.

Sí, todo es una lucha.
A veces, hasta seguir respirando lo es.
Tomas esa bocanada, profunda, y te duele.

Ojalá te transportara ese dolor,
que esa fuerza que emerge te salvara.
Pero al final solo la voluntad te salva,
o la adrenalina.

Lucha, dolor; lucha y dolor. Es todo.
Y no es nada.

Si todo debe convertirse en una lucha,
tiene que ser por recuperarse,
volver a inundarte de luz,
de vida.
De pensamientos salvajes,
de fuerza, de ganas.
De más ganas.

Ya has tocado fondo,
ahora,
solo queda ascender,
ascender.




martes, 25 de agosto de 2015

20 poemas de amor y una canción desesperada. Neruda.


20 poemas de amor y una canción desesperada

Por Pablo Neruda
Editores Mexicanos Unidos S.A.
125 páginas

Que no os engañe el título, esta obra pequeñita y magnánima queda fuera en lo absoluto de la cursilería y el romanticismo del pastiche, esta es una obra dedicada al amor en su vertiente más vital, pasional y nostálgica.

En ella se trata el amor por la amante que se tiene y que se pierde, por el recuerdo de la misma y profundizar en él; el encuentro y el olvido, la posesión y pérdida del ser, y el sentimiento; el amor por la naturaleza, por la patria; el amor que va unido irremediablemente al erotismo y la sensualidad, sin los cuales no podría entenderse ni existir. 
"Quiero hacer contigo 
lo que la primavera hace con los cerezos". 
Con apenas 20 años Neruda escribe uno de los grandes poemarios de su tiempo, y podríamos decir incluso del nuestro, compuso versos inmortales, inigualables.

Utiliza un vocabulario sencillo pero plagado de simbolismo, y, a veces, ambigüedad. Los frutos son una constante, como símbolo de lo deseado y deseable, de la boca y otros miembros de su amada/amante, el mordisco hacia el placer . Las abejas, la miel, las olas, el mar, las mariposas, las espigas... Todos son elementos de la naturaleza (de la naturaleza característicos de su patria, por otra parte) de los que se vale para ahondar en los sentimientos de amor y dolor, amor y deseo, amor y posesión, amor y libertad, amor y olvido, amor y pasión, amor y pérdida, amor y vida, amor y muerte.

"Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.
Es tan corto el amor, y tan largo el olvido".

Neruda no elude ni quiere huir los sentimientos del dolor o la pena, comprende que son la otra cara del amor, y profundiza en ellos y los expresa tal y como los siente, se sirve de sus propias experiencias para escribir sentimientos universales, que trasciendan de lo únicamente personal. 

Es una obra que al completo te seduce, pero de los 20 y la canción desesperada he intentado querido elegir mis cinco favoritos:

3. ¡Ah, vastedad de pinos...
6. Te recuerdo como eras...
15. Me gustas cuando callas...
20. Puedo escribir los versos...
La canción desesperada.

Es una de esas obras que puedes leer en una tarde pero que no dejas olvidada en tu estantería, sino que siempre acudirá a ti, igual que tu a ella.



Señora de rojo sobre fondo gris. Delibes.


Señora de rojo sobre fondo gris.

Por Miguel Delibes.
99 páginas.
Círculo de Lectores.

Es esta una corta novela, muy especial, que trata del amor y de la muerte, del dolor y de la vida. De fuerzas totalmente distintas entre sí, y sin embargo, entrelazadas sin descanso para conformar la realidad.

El protagonista de la historia es también el narrador: un famoso pintor establece un monólogo ante su hija rememorando sus recuerdos desde 1975, justo cuando algunos miembros de su familia son encarcelados por motivos políticos, y sobre todo,  en el momento de la muerte de su mujer, Ana.  

Delibes realiza la tarea de ponerse en la piel del pintor y habla por él, por el personaje que él mismo ha creado.  Y nuestro pintor describirá constantemente la vibrante y carismática personalidad de su mujer, la vitalidad con la que contagiaba a todos los que la rodeaban, la inteligencia soberana que irradiaba, la sensibilidad arrolladora que poseía...
"Quizá fuera su capacidad para sorprender lo que me deslumbró de ella, lo que a lo largo de los años me mantuvo tenazmente enamorado".
Es a causa de su enfermedad y de su muerte cuando él no puede volver a pintar, tal era la magnitud del poder que su mujer ejercía sobre él, ella era su creatividad, su fuerza y su voluntad.
"Miraba mis manos pesadas e impedidas (...). Eran manos agotadas, sin presente ni futuro, inútiles".
La narración es constante, sin capítulos, sin cortes, sin partes diferenciadas, sin diálogos; es literalmente, un monólogo convertido en novela. Por todo ello, el ritmo de la narración es fluctuante, va construyéndose a raíz de los recuerdos y pensamientos que acuden a la mente del protagonista, y por eso, los acontecimientos también aparecen desordenados en el tiempo, es el lector quién debe hacer el esfuerzo de entender qué momentos de la narración pertenecen al pasado o al presente.

Esta carta de amor es tremendamente triste y hermosa a la vez, nos cuenta que el dolor va necesariamente unido al amor, y que la vida y la muerte forman parte del "mismo filo de la navaja", y yo precisamente la interpreto como un canto a la vida, un llamamiento a la sinceridad que nos debemos a nosotros mismos y a los demás,
"Es algo que suele suceder con los muertos: lamentar no haberles dicho a tiempo cuánto los amabas, lo necesarios que te eran. Cuando alguien imprescindible se va de tu lado, vuelves los ojos a tu interior y no encuentras más que banalidad, porque los vivos, comparados con los muertos, resultamos insoportablemente banales",
lo interpreto como el deseo de vivir nuestras vidas intensamente, aprender de todo y sacarle el máximo partido, la esencia de lo que fue, es y será. Ayudarte de todo ello para ser feliz y vivir una vida de la que puedas sentirte orgulloso al mirar atrás
"En el peor de los casos, yo he sido feliz 48 años; hay quien no logra serlo cuarenta y ocho horas en toda su vida".

lunes, 10 de agosto de 2015

Seda. Alessandro Baricco.

Seda

Por Alessandro Baricco
Círculo de Lectores
154 páginas


Este es uno de esos libros que te estremecen, sobre todo al acabarlos. 

Es la tercera que vez que lo leo y tengo la impresión de que consigue transmitirme nuevas sensaciones conforme voy creciendo y viviendo. Su contenido es inmóvil y eterno, pero el mensaje se transforma a medida que lo hace el lector. Se hace más profundo si cabe.

El libro está dividido en 65 capítulos pero resultan extremadamente escuetos.

Se trata de un libro tan especial que temo no poder hacer una reseña que le haga justicia. 

El autor desprende a la novela de florituras o diálogos en demasía, al contrario, son extremadamente escasos; los personajes no parecen desarrollados en profundidad, exceptuando quizás al protagonista. Las descripciones son extremadamente precisas. Y de esta manera, trata de narrar la historia, sobre todo, una historia de sensaciones y emociones profundas. Trata de plasmar sentimientos complejos, que por otro lado, todo ser humano puede vivir en algún momento de su vida, a través de un lenguaje aparentemente sencillo pero cargado de un profundo simbolismo. El lector puede centrarse en todo ello y disfrutarlo sin que otros elementos lo perturben. 

Su lectura se hace pausada y enriquecedora. Las metáforas te llegan. La seda y su tacto infinito como la nada, la libertad y el retorno de las aves de colores, la mirada de unos ojos que no tienen sesgo oriental... Sería injusto afirmar que esto es una historia de amor puesto que Seda nos lleva mucho más allá. Es un libro de viajes, y de viajes al interior de uno mismo, un viaje de introspección y de evolución. Es una historia de aprendizaje y en cierto modo de aventuras. Aventuras espirituales o emocionales quizás, pero aventuras al fin y al cabo. 

Nuestro protagonista despertará a través de la historia. Hasta el momento, se encuentra como mero espectador de su vida, ni si quiera parece que tome sus propias decisiones, pero todo eso cambiará con un -casi- fortuito viaje a Japón. A partir de aquí, viviremos junto a él una exótica experiencia que acariciará nuestros sentidos.
"Ésta no es una novela. Ni siquiera un cuento. Ésta una historia. Empieza con un hombre que atraviesa el mundo, y acaba con un lago que permanece inmóvil, en una jornada de viento. El hombre se llama Hervé Joncour. El lago, no se sabe. Se podría decir que es una historia de amor. Pero si sólo fuera eso no habría valido la pena contarla. En ella están entremezclados deseos, y dolores, que se sabe muy bien lo que son, pero que no tienen un nombre que los designe. Y, en todo caso, ese nombre no es amor. (Esto es algo muy antiguo. Cuando no se tiene un nombre para decir las cosas, entonces se utilizan historias. Así funciona. Desde hace siglos.)" Alessandro Baricco.



Los renglones torcidos de Dios. Torcuato Luca de Tena.


Los renglones torcidos de Dios

Por Torcuato Luca de Tena
Austral
439 páginas


Intrigante, conmovedora y sorprendente.

Creo que en estas tres palabras puede resumirse mi opinión con respecto a esta magnífica novela. Pero me gustaría profundizar en cada uno de esos puntos y explicar el por qué.

Intrigante.

Por la propia trama y cómo va desarrollándose a lo lago de la novela. 

Nuestra protagonista, Alice Gould de Almenara de personalidad arrolladora y altamente carismática, inteligente y elegante como ninguna otra, es internada en un manicomio a esperas de que le diagnostiquen, pues ha ingresado en el hospital debido a la recomendación del médico de familia, alegando que padece una severa paranoia que la ha llevado a intentar envenenar a su marido, aunque sin éxito. Sin embargo, Alice defenderá por el contrario su salud mental a capa y espada y asegura que su ingreso en el hospital es debido a un caso de asesinato que tiene que resolver, porque sí, Alice Gould también afirma que es una detective privada secreta.

Pues bien, a simple vista puede parecer que está claro que la señora está loca de atar, pero cuando comienzas a leer el libro únicamente te asaltarán las dudas. Se establecen dos líneas argumentales: la que defiende que Alice está loca y la que la considera cuerda. Y mientras tanto, el lector va posicionándose de un lado y del otro, asistiendo a una lucha dialéctica magistral. Pero, ¿quién tiene razón aquí? Lo sabrán al final del libro, de momento, ¡hagan sus apuestas!
"Admiro la belleza en la mujer, sobre todo cuando su exterior es como un reflejo de su interioridad"
Conmovedora.

Resulta realmente interesante el escenario donde se desarrolla la novela, en un hospital psiquiátrico, todo un universo en sí mismo. Luca de Tena ingresó por voluntad propia en uno para poder documentarse y vivir las experiencias que allí se dan en sus propias carnes. Y es gracias a esto por lo que podemos asomarnos por una tímida ventana a la intimidad de un mundo que nos resulta desconocido.

Lo que leemos acerca del funcionamiento del hospital, los personajes, sus vivencias, sus males, sus tratamientos, cómo afrontan el día a día enfermos, enfermeras, doctores... todo es real, o al menos, está basado en su propia experiencia. Asistimos a una lucha silenciosa que llevan a cabo día tras día, tanto los unos como los otros, para seguir adelante, elevando lo ordinario a la categoría de lo extraordinario. 
"(las gentes de) Las familias (...) llevaban años sin haber padecido una crisis y que si no se les devolvía a sus hogares era sencillamente por carecer de hogar y no tener parientes próximos o lejanos que quisieran hacerse cargo de la loca o del loco, aunque estuviesen harto más equilibrados que muchos que andan sueltos por las calles o que rigen desde el gobierno los destinos de las naciones".

Sorprendente. 

Como hemos dicho, habrán hecho sus apuestas al comienzo del libro, puede ser que durante el desarrollo del mismo, hayan cambiado de opinión un par de veces, como mínimo, pero he aquí el final: sorprendente, redondo y, para mi gusto, casi roza la perfección.

Espero que lo hayan disfrutado y si no, ¡adelante! Los renglones torcidos de Dios te está esperando.

Yo por mi parte me despido con esta impresionante cita que no podía dejar de compartir con vosotros:


"Recordó los versos de Jorge Manrique: 


...querer el hombre vivir
cuando Dios quiere que muera
es locura.

y los recompuso de esta suerte:

No es cordura
querer hacer revivir
a aquel que quiere morir".


 

 

domingo, 26 de julio de 2015

keep it secret...


No intentes protegerlo de nada, no hay caja lo suficientemente fuerte que lo encierre. Los sentidos siempre lo despiertan. Siempre lo llaman, lo llenan, de todo.

No creas que eres débil si lo muestras, al contrario, tu fortaleza en ello radica, en dejar que se manche de cualquier cosa que no eres capaz de controlar, que se te escapa, que tal vez ni siquiera entiendes y llegar a soportarlo. No hay seguridad que valga, es absurdo. No lo intentes, simplemente, vive.

Vivir no es seguro.

Pero ahí está la belleza, ¿no?



miércoles, 22 de julio de 2015

Estoy aquí.


Vengo a decirte que pares. Sí, así de simple.

Deja de añorar los sueños que tuvisteis. Porque lo más probable es que no fueran vuestros, sino tuyos.

Aquellos que no se cumplieron, que quedaron manidos en el grueso de tu mente. Que allí se pudrieron sin que nadie les llorase.

Creo que necesitas que te recuerde lo fuerte que eres por ti misma, y aquí estoy. Vengo a recordarte tus propias palabras. Esas que siempre repetías hasta la saciedad. Cuando decías que no necesitabas a una persona que te completase, porque tu estabas entera.

Escúchame, lo estás.

Sales y sales adelante, una tras otra, y no dejas que nada ni nadie te pare, no te rindes, peleas y vives tu propia vida, y eres capaz de disfrutarla, a pesar de todo, buscas tu felicidad, tu camino... ¿Y sabes? Aún no he conocido a nadie que con tu edad haya superado tantas cosas y siga sonriendo de ese modo, iluminando.



Acabar.


Me pide que acabe en su boca sin saber
que es ahí donde yo empiezo.



lunes, 11 de mayo de 2015

Hagamos un canto a la vida.

Hagamos un canto a la vida viviéndola.

Devoremos el mundo paso a paso,
sin pantallas de por medio.

Conozcamos de verdad, gritemos, respiremos verdades profundas,
eternas,
de las que estuvieron ahí desde siempre,
esperándote.

Háblame en canciones
que yo te amo en poemas.

Vamos a vibrar de felicidad y de pasión,
que la historia sea realmente interminable,
que no pasemos por ella sin pena ni gloria.
Dejemos huella.

Agarra bien fuerte este momento. Es tuyo.
Tuyo.

Hagamos un canto a la vida viviéndola.





miércoles, 29 de abril de 2015

1984. George Orwell.


1984
Por George Orwell
Debolsillo
350 páginas

A veces me pongo retos estúpidos como "¿Si tuviera que describir este libro en tres palabras cuáles serían?" y en ocasiones, como es el caso, me respondo: Me ha destrozado.
"LA GUERRA ES LA PAZ 
LA LIBERTAD ES LA ESCLAVITUD
LA IGNORANCIA ES LA FUERZA"
Al acabar las dos últimas frases se me ha puesto toda la carne de gallina. Me ha parecido todo tan cercano a la realidad, tan crudo, tan duro y cruel. Pero merece la pena leerlo, una y mil veces. Aunque mis mil veces deberán esperar, mi cerebro necesita un pelín de descanso emocional.

Esta distopía se encuentra ambientada en el Londres de 1984, y al estar escrita en 1949, queda claro que no se habla sobre el pasado, sino que vaticinaba un futuro bastante lúgubre y deprimente. Los ciudadanos de este Londres viven controlados por completo (o casi), de forma asfixiante y demoledora por la Policía de Pensamiento. Nuestro protagonista, Wiston Smith, es un funcionario del sistema y se dedica a reescribir la historia para el Partido, que es el que decide cuál es la versión oficial de los hechos, e incluso, lo que ha ocurrido de verdad. La trama comienza cuando Wiston despierta y se replantea si es posible la existencia de una vida que no sea la sumisión.
"Era posible, sin duda, imaginar una sociedad en la que la riqueza, en el sentido de los lujos y las posesiones personales, se distribuyera de manera equitativa, mientras el poder seguía en manos de una casta privilegiada. Pero si todo el mundo disfrutara del ocio y la seguridad, la gran masa de personas que por lo general están embrutecidas por la pobreza terminarían cultivándose y aprendiendo a pensar por sí mismas; y, más tarde o más temprano, repararían en que dicha minoría privilegiada carecía de función y acabarían con ella. A largo plazo, una sociedad jerárquica solo era posible si se basaba en la pobreza y la ignorancia".
Como siempre, quiero hacer una reseña sin destripar la historia o el argumento al completo, sigo siendo de las que opinan que es mucho mejor llegar a un libro sin saber muy bien de qué va. Pero inevitablemente ya sabéis que es un libro con un alto contenido político, y sobre todo reflexivo. Que os hará pensar y os indignará al daros cuenta de cuánto se parece en algunos puntos a la realidad de nuestros días. Realiza una profunda crítica al totalitarismo, y al final, da la sensación que estás leyendo una historia de terror.
"El Ministerio de la Paz promueve la guerra; el Ministerio de la Verdad Miente; el Ministerio del Amor tortura; y el Ministerio de la Abundancia favorece el hambre".
En numerosas ocasiones y en muchos ámbitos diferentes de mi vida me han preguntado ¿para qué sirve la Historia? tonta de mí, siempre he tratado de dar razones contundentes que defendieran su existencia, pero está claro que no tengo la labia de Orwell, me parece que a partir de ahora responderé simplemente: 1984, léelo, en el se encuentra la respuesta.




lunes, 27 de abril de 2015

A veces las venas crujen.

Huesos rotos y venas que me crujen.

Vienes con mirada inquebrantable,
y así responden mis poros,
todos y cada uno,
se abren con tu olor.

Son galaxias, nuestras vidas.
Y se entrecruzan sin saber a dónde nos van a llevar.
Al infinito quizás,
a las dudas.
Puede que a la eternidad de una sensualidad que abrase,
que nos arrase
la piel.
Tu piel.
Tan desconocida.

Y cómeme. Mas eso quisiera yo,
morderte,
conocerte,
llegar a tu cerebro y más aún, a tu instinto,
primitivo.

Animal.

Sigo con mis huesos rotos y con las mismas ganas,
astilladas, desperdigadas por tantas partes
que difícilmente podría juntarlas de nuevo.
Con concierto y con razón.

Pero qué mentirosa...
A quién pretendes engañar
racionalizando lo irracional.
Lo húmedo.

Es por tu culpa. Todo esto.
Prendes fuego a nuestros interiores y ahora,
¿quién controlará las llamas?

Permíteme que dude de tu capacidad
y aún más de la mía.




domingo, 12 de abril de 2015







Tengo la llave de una puerta que se ha perdido.
O que yo no he sabido encontrar.
O quizás es que nunca estuvo ahí para mí.
Es probable que solo sea el resquicio de un sueño.
Sueños borrosos y futuros inciertos.

El viento lleva palabras, secretas.















Ella nunca se atrevió a decirle que lo deseaba.
Como las flores desean los rallos del sol tras el invierno. Tras la muerte.
Jamás se atrevió a contarle cuánto le cautivaba su pensamiento, 
sus palabras,
su voz.
Tampoco le contó cuán hondo calaba la pena de no sentir el tacto de sus manos. 
De sus labios.
Nunca le habló del dolor.
Solo hizo lo correcto.
Y sonreír.
Y guardar el secreto como tantas otras mujeres antes que ella.


El Señor de los Anillos. La Comunidad del Anillo I. J. R. R. Tolkien.

El Señor de los Anillos. La Cominudad del Anillo I.

Por J. R. R. Tolkien
Minotauro
548 páginas (sin mapas)

¿Cómo hacer una reseña de semejante obra? Realmente impresionante La Comunidad del Anillo

He disfrutado muchísimo de esta lectura, supongo que en gran parte se debe al hecho de haberla leído conjuntamente con un grupo de amigos, un día a la semana nos reuníamos para comentar los capítulos y ha sido enriquecedor. Es muy divertido conocer cada una de las opiniones, a veces en común y otras tan dispares. 

Y cayendo en el mayor de los tópicos, pero realmente cierto, es sorprendente el universo inmenso y complejo que Tolkien creó. Con sus distintas lenguas, culturas, sociedades, creencias... Puede que no sea del agrado de todo el mundo, y es comprensible, pero aún así es imposible menospreciar su trabajo. Su magnífico trabajo. 

Este primer libro realmente me ha emocionado, las películas me encantaban, pero como la mayoría de las veces, ¡la novela las supera con creces! Sobre todo por los personajes, que la mayoría de ellos crece en carisma, carácter, personalidad y profundidad por escrito. Y de ellos también me he llevado varias sorpresas, sobre todo con el desaparecido -en la gran pantalla- Tom Bombadil, cuántos misterios y teorías habrán surgido a raíz de este enigmático personaje... *Tolkien, ya te vale... La que ha liao el pollito... Pero te quiero igual*.

Es cierto que la novela tiene un volumen importante, sin embargo, en ningún momento se me hizo densa, las famosas numerosas descripciones insufribles, no me lo parecieron en absoluto; el capítulo más largo de la novela,"El Concilio de Elrond", me pareció de los más interesantes y completos; y es probable que precisamente el capítulo más pesado, fuese el menos pensado, el penúltimo, de verdad que el trayecto en las barcas fue insufrible, pero mereció la pena solo por su magnífico final: el encuentro con los inmensos colosos de los Argonath. 


La evolución de cada uno de los personajes en este primer libro es asombrosa, y sabiendo todo lo que les queda aún por vivir... No puedo imaginarme cuánto más les queda por crecer. ¡Menos mal que ya hemos empezado con la segunda parte!





















Otra de las cosas que a mí personalmente me ha enamorado, ha sido la idea del ciclo en el primer libro, es decir, que toda esta compleja historia comienza con los sencillos Hobbits en su Comarca, y que con estas mismas gentes termina. Además, todo el peso, la salvaguarda de todas las razas, la supervivencia de la Tierra Media, recae sobre las personas más sencillas de todo ese Universo, aunque realmente, no podría ser de otro modo dadas las características del Anillo.












sábado, 11 de abril de 2015

Sputnik, mi amor.Haruki Murakami.

Ilustración basada en la novela, por: "lauraassucena"
Sputnik, mi amor.

Por Haruki Murakami
Tusquets Editores
244 páginas 

Mi primer bocado a la obra de Murakami y joder qué delicioso. Sputnik, mi amor, sí que lo eres para mí desde ahora mismito.

Qué forma de escribir, qué original, sabía que lo tachaban de "especial" pero guau. Grata, muy grata ha sido la sorpresa que me he llevado con esta novela/relato/historia... no sé muy bien cómo llamarla.

Lo único que quiero contaros al respecto de su tema, es que se trata de un "triángulo amoroso", y lo pongo entre comillas porque no es tan simple, para nada. No es la típica novela de tres al cuarto que trata el tema más que trillado de toda la literatura. Y de verdad, si podéis llegar al libro sin saber absolutamente nada de la historia, mejor, así os sorprenderá. (Los que no la hayáis leído, por supuesto).

Solo puedo decir que me ha dejado llena de melancolía, me ha removido algo por dentro, me ha conmovido, impresionado, entusiasmado... Tiene bastante de misteriosa y te deja con mil y una preguntas y teorías, pero merece la pena la experiencia. Algunos puntos me parecieron bastante surrealistas, pero no lo digo en tono negativo, todo lo contrario.

Algunos detalles que además me han encantado de Sputnik, han sido todas esas referencias a literatura, música clásica y mil cosas más, algunos podrán pensar que es un canto al ego de Murakami, que trata de mostrar lo culto que es y toda la parafernalia, pero a mí por el contrario me han entusiasmado, incluso hice parones durante la lectura para averiguar de qué hablaban en el caso de no conocer cierta canción (en cuyo caso, las escuchaba y me hacía sentir aún más dentro de la historia) u obra literaria, comprender mejor a los personajes, por extraño que pueda parecer. Y hablando de ellos, los personajes, cada uno de ellos es especial, extraño, raro en su medida, lo que enriquece aún más la historia, que entusiasma, y ya digo, no por su tema en sí, sino por la magistral forma en la que está escrita.

Tras este libro solo puedo decir que necesito más de Murakami, y de paso, quiero conocer mucha más literatura oriental.




Sentido y Sensibilidad. Jane Austen.

Young woman reading. Delphin Enjolras
Sentido y Sensibilidad.
Por Jane Austen.
Leído en kindle.

¡Qué lástima! Estaba deseando introducirme en el mundo de Jane Austen, vi la adaptación cinematográfica de esta novela (la de 1995 dirigida por Ang Lee), la cual me gustó bastante, además de ser una auténtica fan de la película de Orgullo y Prejuicio del director Joe Wright, que para mí es una auténtica delicia; por tanto, estaba deseando leer de una vez a esta autora, estaba convencida de que me iba a encantar...

Pero, al menos con este primer acercamiento, no ha sido así. No suele ocurrirme que me guste más la adaptación del libro a la gran pantalla, pero supongo que esta puede ser la excepción que confirme la regla.

Me ha gustado muchísimo la forma en la que estaba escrito el libro, su narración, sus descripciones, sus diálogos, la crítica realizada a determinados aspectos de la época. Los personajes. Me ha encantado la idea de la contraposición absoluta de las dos hermanas; una, la personificación de la razón y el buen juicio, y la otra, de la pasión o el sentimiento casi irracional, pero sincero ante todo. La forma en que cada una de ellas ve y valora el mundo que las rodea y cómo actúan ante él. Además, he disfrutado muchísimo leyendo acerca de las costumbres de la época, sin embargo, es este mismo aspecto el que finalmente me ha disgustado más. La vida "burguesa" de las mujeres de la época era monstruosamente aburrida, o eso me parece a mí, claro que no estoy diciendo nada nuevo. Sus ocupaciones y deberes aburrirían a una piedra y serían capaces de enriquecer a... bueno, realmente, a nada. Una no puede estar todo el santo día cotilleando sobre la vida de todo el mundo, yendo de una reunión para el té a otra, tejiendo, cantando o tocando las obras adecuadas al piano. La lectura que yo -particularmente- realizo, es la de una vida plena en restricciones, sin libertad de juicio o elección de intereses o de actuación, subordinada a lo socialmente correcto, y por supuesto, al patriarcado. Esto hizo que me agotara bastante el libro en algunos momentos y que, francamente, se me hiciera pesado.

Pero lo peor para mí ha sido el tratamiento del tema. Sabía que iba a leer una historia que girase en torno al romanticismo etc., pero el hecho de esa desesperación que llegan a sentir por los hombres, por la necesidad de estar con ellos, el miedo a estar solas... El hecho de que se considere que una mujer no puede valerse por sí misma, me cansó demasiado. Sé que estamos leyendo un tema de otra época, donde el pensamiento, la sociedad y la cultura son realmente diferentes, y lo comprendo desde ese punto de vista, pero en fin, supongo que no me va demasiado que una historia gire en torno a lo mismo una y otra vez.

Pero no voy a rendirme con Jane Austen tan fácilmente, me gusta cómo escribe, y me parece muy sincera, en ocasiones parece que ella misma ha vivido muchos de los momentos que se leen en su obra. Y tiene bastantes donde elegir, así que, cuando me "haya repuesto del disgusto" (qué exagerada soy), ¡lo intentaré de nuevo!



miércoles, 8 de abril de 2015

Carta al abuelo.

No voy a comenzar esta carta con "Querido abuelo", simplemente, no puede ser.

Ayer estuve en tu funeral. La misa y las palabras del cura fueron realmente absurdas, creo que tu mismo te hubieses quedado dormido, es natural. Además, no tenían nada que ver con tu vida, ni con las nuestras. Al terminar su discurso, el señor cura, repitió unas cuantas veces Manuel os ha amado, Manuel os ha amado, Manuel os ha hecho bien, recordad felizmente cuánto bien hizo Manuel en vida.Y fue doloroso.

La verdad es que lo siento mucho, lo siento todo.

Siento que hicieras tanto daño durante tu vida, a mi abuela para empezar, destrozándola por fuera y por dentro, de todas las formas posibles que se te ocurrieron. Siento mucho que hicieses infelices a tus hijos, y sobre todo a mi padre. Y a tus nietos, para finalizar. Siento que tu mismo nunca fueras feliz. Porque con ese nudo final en la garganta demostraste cuánto te carcomía la conciencia, por tantas cosas, tanto mal, seguramente, te mordía las entrañas. Es natural.

Puede que el veneno que te recorría las venas acabase finalmente contra ti, tu final... Después de todo, es trágico, y absurdo e incomprensible. Un amigo me dijo que fue justicia poética. Sí, creo que le doy la razón.

Abuelo, yo te había enterrado hace 12 años, tras aquella noche negra y de locura, tras la huida desesperada y deprimente que nos obligaste a llevar acabo. Mi despedida, creí haberla hecho por aquel entonces, pero ayer se hizo real y palpable. Ayer tenía dos momentos en mi mente, a la vez, martilleándome el cerebro. Cuando me decías sonriente -y creía que feliz- conmigo en tu regazo: Eres mi nieta favorita, y siempre lo serás, eres la primera, la mayor de todos, y nunca olvidaré estos ojos brillantes tan bonitos. Y tu chapolina de hierro alzada con ambas manos directa a la cabeza de mi padre.

Fuiste en vida dos personas diferentes, algunos de tus nietos no llegaron a conocerte como yo, y solo recordarán al gigante del abuelo con su bigote y su sonrisa, con las mejillas coloradas, que jugaba con ellos y les hacía reír a carcajadas. Les envidio en cierta medida, no quisiera recordarte como lo hago yo, cuando esas mejillas alcoholizadas ya pasaban de la rojez a la cólera, la ira, el odio.

Siento mucho que vivieras una vida miserable, y tuvieses un final a su altura.

Esto es una despedida, la despedida final, real. Me estuve preguntando si te había perdonado, y realmente todavía no lo sé. Cuando me enteré de tu noticia me quedé fría porque, comprende, para mí ya estabas muerto. Creo que sentí indiferencia al fin y al cabo. Y pena, en general, pena.

En estos momentos quisiera creer en la existencia de Dios, así al menos me quedaría el consuelo de que tu alma, por fin, estaría curada, sanaría y sería feliz. Seguramente, Dios te perdonaría y te acogería como a todos sus hijos, al menos así tendrías un final menos miserable.

El final miserable de que al morir, no queda nada, la materia se descompone y el legado que dejas es uno de pena y tristeza.

Adiós, abuelo.