martes, 13 de octubre de 2015

Pelea.

Si todo se convierte en una lucha...

Levantarse de la cama,
ir a trabajar,
ponte a estudiar,
sobrevive a tus pensamientos,
sobrevive a la gente.

Sobrevive a sus ataques, a sus ganas de humillarte,
sobrevive a sus esfuerzos por domesticarte.

Sí, todo es una lucha.
A veces, hasta seguir respirando lo es.
Tomas esa bocanada, profunda, y te duele.

Ojalá te transportara ese dolor,
que esa fuerza que emerge te salvara.
Pero al final solo la voluntad te salva,
o la adrenalina.

Lucha, dolor; lucha y dolor. Es todo.
Y no es nada.

Si todo debe convertirse en una lucha,
tiene que ser por recuperarse,
volver a inundarte de luz,
de vida.
De pensamientos salvajes,
de fuerza, de ganas.
De más ganas.

Ya has tocado fondo,
ahora,
solo queda ascender,
ascender.




No hay comentarios:

Publicar un comentario